Se como una flor.
Debes tratar de ser de la misma manera que una flor: abierta, franca, ecuánime, generosa y amable. ¿Sabes qué representa?
Una flor está abierta a todo lo que la rodea: la naturaleza, la luz, los rayos del sol, el viento, etc. Ejerce una influencia espontánea en todo a su alrededor. Irradia belleza y bondad.
- Es franca: no esconde nada de su belleza, y la deja fluir fuera de sí. Lo que está dentro, lo que está en su interior, lo deja salir con el propósito de que todos puedan contemplarlo.
- Es ecuánime: no tiene ninguna preferencia. Todos pueden disfrutar de su belleza y su perfume, sin rivalidad. Es igual y la misma para todos.
- Es generosa: sin reservas ni restricción, da la belleza misteriosa y el perfume propio de la naturaleza. Se sacrifica completamente para nosotros, su vida se entrega para expresar esta belleza y el secreto de las cosas escondidas dentro de sí.
- Es amable: tiene tanta ternura, es tan dulce y cariñosa, tan cercana a nosotros. Su presencia nos llena de júbilo. Es siempre alegre y buena.
Feliz es quien puede intercambiar sus cualidades con las verdaderas cualidades de las flores. Trata de integrar estas cualidades refinadas dentro de tí mismo.
LA MADRE |